había un televisor de pantalla plana, un refrigerador minibar y una mesa de trabajo en la habitación, me ha encantado todo. una zona tranquila, una ubicación estupenda super cerca de la estación central, también de restaurantes. el barrio san lorenzo merece ser explorado.

La habitación doble en la que me quedé tenía un minibar, un televisor de pantalla plana y una mesa de trabajo. El personal y el director fueron excelentemente complacientes. La ubicación del lugar era céntrica.

Ubicación: el hotel estaba al lado de la estación central, de restaurantes y de bares. Una habitación muy limpia e impecable con vistas a la calle. El personal fue excelentemente complaciente cada vez que tuve que hablar con ellos.

Los empleados son amables y las habitaciones son grandes, impecables y equipadas con una amplia cocina y un buen aire acondicionado.

Todo muy nuevo y limpio. Anfitrión atento y amable.Buena ubicación y conexiones.Moderno y con comodidades.Atención en toda nuestra estancia.

De verdad no hay nada que no me haya gustado.

Me alojé en un apartamento moderno y bien equipado, a solo 15 minutos a pie de la estación de Termini. La ubicación era conveniente, con excelentes conexiones en metro y tranvía al centro de la ciudad. El anfitrión fue extremadamente atento y servicial, asegurándose de que mi estancia fuera perfecta. El apartamento estaba impecable, recién reformado y las comodidades eran de primera categoría. Recomiendo este lugar a cualquier viajero de negocios que busque comodidad y atención personalizada.

Quizás lo único negativo fue que se encontraba un poco alejado del centro de la ciudad.

Acabo de volver de un hotel en el que me he alojado en Roma y tengo que decir que quedé muy satisfecho con mi estancia. En primer lugar, debo destacar el precio, ya que considero que fue muy bueno en relación a lo que recibí. Además, pude apreciar la atención al detalle en el hotel, como por ejemplo, la limpieza impecable y las habitaciones modernas y recién reformadas. me sorprendió gratamente la ubicación del hotel en una calle tranquila, a unos 20 minutos a pie de la estación Terminal. Fue genial poder escapar del bullicio del centro de la ciudad y disfrutar de la tranquilidad. El servicio del personal también fue excelente, siempre atento y amable. Otro detalle que me gustó fue el desayuno, que estaba incluido y ofrecía una variedad de opciones deliciosas.

Sinceramente, no encuentro ninguna queja. Todo estaba bien.